Peregrinación de la Parroquia al Santuario de Consolación de Utrera con motivo del Año Jubilar de la Misericordia.
Durante la Santa Misa en el Santuario de Nuestra Señora De consolación de Utrera
La Salve en el camarín de La Virgen de Consolación
Recogemos a continuación la información que el 9 abril se publicó en la web del Santuario de Consolación de Utrera, en el Año Jubilar de la Misericordia. (santuarioconsolacion.org).
«La Parroquia de Ntra. Sra. de los Ángeles y Santa Ángela de la Cruz de Sevilla peregrinó el sábado 9 de abril hasta el Santuario de Consolación para Ganar el Jubileo de la Misericordia.
Unas 60 personas, con su párroco, fueron recibidos en la entrada del Santuario por D. Óscar Uwitonze y por la Hermandad de los Muchachos de Consolación.
D. Santiago Fernández, Hermano mayor de la citada hermandad, dio la bienvenida a los peregrinos, que, tras unos minutos de descanso, participaron en la Misa cantada, presidida por el Párroco de Ntra. Sra. de los Ángeles y Santa Ángela de la Cruz, D. Manuel Sánchez Sánchez, acompañado por D. José Pérez Fernández, Acólito Instituido.
Finalizada la celebración Eucarística, se realizó la tradicional foto de familia, y ya arriba, en el Camarín de la Virgen, se cantó la Salve».
Cantamos la Salve en el camarín de La Virgen
Regresamos a casa felices y no podemos dejar de expresar desde aquí nuestro más sincero agradecimiento a D. Óscar y a la Hermandad de los Muchachos de Consolación por su entrañable acogida y por el cuidado de tantos detalles que nos hicieron palpar el gozo del Jubileo de la Misericordia Divina en su más profundo sentido. Lo que encontramos allí fue mucho más que una excelente organización: Recibimos el Don del Perdón y de la Reconciliación con Dios y con los hermanos, a través de ese derroche de cariño fraterno y de alegría cristiana. ¡MUCHAS GRACIAS!
¡AH! Y también ¡ENHORABUENA! por vuestra magnífica web, en total consonancia con la grandeza del Jubileo que por Gracia de Dios pueden alcanzar tantísimas personas, a los pies de Nuestra Señora de Consolación en su Santuario de Utrera. ¡HASTA SIEMPRE!
Sin duda, las gracias que la Santísima Virgen nos alcanzó en este día de convivencia fraterna, en el que juntos fuimos a ganar el inmenso Don del Jubileo, revertirán en el crecimiento – interior y comunitario – de la alegría de evangelizar, en todos y cada uno de los que formamos parte de esta parroquia. Y esta alegría se irradiará a nuestros vecinos, familiares y amigos, si permanecemos fieles en nuestro empeño por seguir siendo peregrinos «MISERICORDIOSOS COMO EL PADRE».
