Nos viene bien a todos
Oración del Papa Francisco. Es preciosa y nos puede venir genial a todos: padres jóvenes, educadores, amigos, abuelos…
+ Ayúdame Señor a comprender a mis hijos, a escuchar
pacientemente lo que quieren decirme,
y a responderles todas sus preguntas con amabilidad.
+ Evítame que los interrumpa, que les dispute o contradiga.
+ Hazme cortés con ellos, para que ellos sean conmigo de igual manera.
+ Dame el valor de confesar mis errores, y pedirles perdón cuando comprenda que he cometido una falta.
+ Impídeme que lastime los sentimientos de mis hijos.
+ Prohíbeme que me ría de sus errores, o que recurra a la afrenta y a la burla como castigo.
+ No me permitas que induzca a mis hijos a mentir o a robar.
+ Guíame hora tras hora para que confirme, por lo que digo y hago, que la honestidad es fuente de felicidad.
+ Modera, te ruego, la maldad en mí.
+ Evítame que los incomode, y cuando esté malhumorada, ayúdame, Dios mío, a callarme.
+ Hazme ciega ante los pequeños errores de mis hijos, y auxíliame a ver las cosas buenas que ellos hacen.
+ Ayúdame a tratar a mis hijos como niños de su edad, y no me permitas exigirles el juicio y convicciones de los adultos.
+ Facúltame para no robarles la oportunidad de confiar en sí mismos, pensar, escoger o tomar decisiones.
+ Oponte a que los castigue para satisfacer mi egoísmo.
+ Socórreme, para concederles todos los deseos que sean razonables, y apóyame, para tener el valor de negarles las comodidades que yo comprendo que les harán daño.
+ Hazme justa y ecuánime, considerada y sociable para con mis hijos, de tal manera que ellos sientan todo mi amor. Amén.